miércoles, 20 de junio de 2018

Tanguillos de Chicucos. Javier Ruibal y Josete Ordoñez



TANGUILLOS DE CHICUCOS
 Atento porque te habla el rey del Ultramarino,
 yo le vendo al que tiene pasta pero le fío al que está canino
 Soy el príncipe del arenque, el bacalao y la alubia fina,
 tengo un fino y un aguardiente que la gente se arremolina,
 la canela y el té a la menta y la pimienta del Camerún, las ciruelas de Damasco,
te vendo en frasco mormo de atún. Mira niña,
lleva un cuartillo de este membrillo que no es común,
las castañas en orujo pégate un lujo con tu marío
 y un litrillo de este coñac que veras que está que quita el sentido
 Y así pregonaba yo en aquellos tiempos de gloria
 cuando Cádiz era otra historia
pero aquello sanseacabó con la crisis y la inflación,
el asunto se puso feo, y el colmao que era un ateneo
y daba vida a la población se murió
porque justo al lao de mi tiendita modesta se instaló un supermercao
 y ahí se acabó la fiesta.
 Con el envase al vacío se perdió el papel de estraza,
 el jaleo y el mujerío y el dulce de calabaza.... 
Hoy gracias al Mercadona, al Día y al Covirán desayuno con cereales
en vez de manteca colorá,
 que jodienda pa la merienda un Bollycao que no sabe a ná
 y de la noche a la mañana nos llegó la modernidad,
 ahora somos consumidores que no es ni chicha ni limoná.

No hay comentarios:

Publicar un comentario