Rafael del Riego.

Hace dos siglos ejecutaban en la Plaza de la Cebada de Madrid a Rafael del Riego, que en 1820 se sublevó contra Fernando VII e implantó en España un régimen constitucional al amparo de la Constitución de 1812 (La Pepa). Se consumaba la venganza del mamarracho de Fernando VII contra la persona que hizo funcionar con normalidad a las instituciones constitucionales por primera vez en nuestra Historia. Como es norma en este país, los absolutistas, la Iglesia, la aristocracia, acabaron con el sueño de una revolución liberal triunfante. 

Lo tildaron de traidor. Bendita traición la suya.