La nada o yo

Hace ya muchos años un buen amigo (gran teórico, de los que quedan pocos) me dijo algo parecido a lo que Rajoy lleva practicando desde tiempo inmemorial, algo así como:"En política la mejor estrategia es esperar a ver si hay errores del rival." Cuanta razón tenía.  Nadie se esperaba este garrafal error de Iglesias y Montero que, seguro, traerá consecuencias en Podemos y en la política nacional. Nadie se esperaba este tiro en el pie con la hipoteca y el chalet.

Algunos tratan de quitarle hierro al asunto, pero no es un asunto menor, su discurso salta por los aires. El problema no es el chalet sino la coherencia del discurso. Llevan días explicando, Iglesias y sus acólitos en las redes sociales, que es un asunto privado sobre el que no deberían aclarar nada y ayer se  sacan de la chistera  someterse  a un referéndum chantajista, con una pregunta trampa,  viniendo a decir o me avaláis o el barco se va a pique, cuando lo que debería hacer es consultar a su propia conciencia si ha sido coherente con el discurso que lo convirtió-con indudable éxito- en líder político. Trasladan  a las bases la responsabilidad de una decisión que cualquier líder honesto la hubiera tomado por sí mismo. Hoy mismo ya hay meritorios peloteando,lanzando tuits de apoyo. de campaña en las RRSS. Recurren a la vieja táctica de elegir entre la nada o yo.